Cerraduras
controladas con el móvil
Que las nuevas
tecnologías avanzan a pasos agigantados es algo que ya sabe todo el mundo.
En este caso nosotros, como cerrajeros en Barcelona, nos vamos a centrar en una
de las últimas aplicaciones de las nuevas tecnologías al mundo de las
cerraduras. Hablamos de cerraduras
controladas con el teléfono móvil, el último invento de la domótica.
En primer lugar, definiremos domótica. Podemos decir que es la tecnología aplicada a la automatización
de cualquier dispositivo de una vivienda (electrodomésticos, puertas, ventanas,
calefacción, ventilación…). Este tipo de tecnologías siempre se ha visto como
algo muy propio del futuro, pero cada vez parece más claro que el futuro está muy
cerca, si no está ya aquí.
Parece que el presente de la domótica está orientado sobre
todo al control mediante los teléfonos móviles, que son los grandes
protagonistas tecnológicos de nuestra era. Y un claro ejemplo de esto es la
fabricación, por parte ya de varias marcas, de cerraduras inteligentes que se controlan con smartphones.
Las
posibilidades que ofrece esta tecnología son innumerables; de momento, además
de abrir la puerta, se puede grabar a posibles intrusos, recibir avisos en el
móvil si alguien entra o intenta entrar en casa, etc. En el caso de la apertura
de la puerta nos encontramos también con varias posibilidades: desde abrirla
con un click en el móvil hasta hacerlo solo con tocar la cerradura llevando el
móvil en el bolsillo.
A pesar de las diferencias entre los distintos modelos,
parece que la base del funcionamiento es la misma: en lugar de tener llaves
físicas, estas cerraduras funcionan con
claves numéricas que normalmente van cambiando para aumentar la seguridad.
Como toda nueva tecnología, al principio genera dudas acerca de su seguridad,
pero, como toda nueva tecnología, la mejora en este tipo de aspectos es
constante, por lo que no habrá que perder de vista a este tipo de “cerraduras
del futuro”.
Lo que nunca hay que olvidar al poner una cerradura de este tipo, es que la domótica, el móvil o el smartphone (como le queráis decir), siempre actúan sobre una cerradura física situada en la puerta. Así que por muy inteligente y cómodo que sea, siempre hay que tener una buena base en la que trabajar para no llevarnos ningún susto. No siempre lo mas moderno es lo mejor.